El estrés hace comer más...

 

Utilizar la comida para aliviar el estrés es un error que sólo conduce a una dieta poco saludable y al aumento del peso.

Estudios  ha demostrado recientemente que las mujeres sometidas a estrés laboral (burnout) tienen a comer más y de forma impulsiva. El estudio se llevó a cabo con 230 mujeres de Finlandia, un 22 por ciento padecía algún grado de agotamiento laboral y el grupo tendía a comer según las emociones y de manera descontrolada. En este estudio se comprobó que las mujeres más estresadas con el trabajo tendían a comer por causas emocionales, es decir, comían en muchas ocasiones por estrés, ansiedad o depresión, en lugar de hacerlo sólo por hambre. Es más: eran más propensas a comer "descontroladamente". Las personas que comen por impulsos emocionales tienen tendencia a comer entre horas “picar” alimentos ricos en calorías, como: snacks, chocolatinas o comidas de tipo “fast food”. Estos son alimentos ricos en grasas y calorías que llevarían a un incremento del peso. Una forma de controlar el estrés es hacer ejercicio físico, como salir a caminar o realizar cualquier deporte que motive a la persona y le ayude a desconectar de sus problemas y ansiedades. Es mejor saciar ese hambre o ansiedad tomando té verde, alguna fruta de temporada, tomando agua, aunque cueste acostumbrarse a la idea de no " chuchear" entre comidas, quizá un pedacito de chocolate el cual si se consume de forma moderada, dentro de una dieta equilibrada no tiene por qué favorecer el aumento de peso.   Ánimos!! Belén María Bloksa Gordo